El vestíbulo o hall de entrada es la primera impresión de nuestro hogar y también es el lugar donde deben convivir las llaves, bolsos, abrigos y hasta zapatos. Descubrí en esta nota los mejores tips para lograr un cálido espacio de bienvenida.
Decidir el almacenaje ideal para tus necesidades empieza con diferenciar entre 3 tipos de objetos que conviven en tu recibidor:
Ropa de calle de uso diario: es ideal tenerla siempre a mano, podés colgarla en ganchos de pared o estanterías abiertas. Para los zapatos de cada día, instalá un zapatero de poco fondo con estantes inclinados. Así podrás guardar unos cuantos pares sin apenas necesitar espacio.
Ropa de calle que usas de vez en cuando: un pequeño armario en la entrada protegerá los abrigos del polvo. Añadíle a las puertas de ese armario un espejo y completalo con estanterías movibles y cajas o cestas para guardar prendas estacionales como los guantes y la bufanda.
Objetos pequeños: cajones para llaves, compartimentos para cargar el celular, estantes para el correo y un paragüero son pequeños detalles que sin darte cuenta te harán mucho más fácil ubicar cualquier cosa.
TIPS
#1. Un banco multifuncional para quitarte los zapatos también puede tener una parte inferior para almacenaje provisional como las mochilas y el bolso del gimnasio, y aun así seguir teniendo el recibidor ordenado.
#2. Más espacio gracias a la barra con gancho. Añadir un riel con ganchos al interior de tu armario del vestíbulo te dará un espacio extra para almacenar pequeñas cosas, como la bufanda, las llaves o la bolsa para ir al supermercado.
#3. El almacenaje abierto te permite tener todo organizado con todo a la vista. Si le sumás un espejo, podrás chequear tu imagen antes de salir de casa.
#4. Canastos para las cosas pequeñas. Ideales para tener a mano las llaves, el correo y el cargador del teléfono.
