Fotografía| Foster + Partners
En el exclusivo barrio Carrasco de Montevideo, “The Edge” comienza a tomar vida. Esta colaboración entre Foster + Partners y Ponce de León Architects marca el debut del estudio británico en Uruguay y se perfila como un hito en términos de calidad, estética, funcionalidad y sostenibilidad.
Con solo ocho unidades residenciales, “The Edge” ha sido diseñado para ofrecer una experiencia de vida exclusiva y selectiva a sus futuros residentes.
Cada detalle, desde las dimensiones de las unidades hasta la disposición de los espacios interiores, ha sido cuidadosamente concebido para asegurar la máxima comodidad y elegancia.
La colaboración entre Foster + Partners y Ponce de León Architects ha dado lugar a un diseño innovador que fusiona la sofisticación moderna con la sensibilidad local.
Ubicado a lo largo de la prestigiosa Rambla Tomas Berreta, “The Edge” se distingue por su distintiva fachada compuesta por terrazas privadas que se extienden a lo largo.
Estas terrazas no solo ofrecen vistas panorámicas del entorno costero, sino que también añaden un elemento de dinamismo al diseño general del edificio.
La elección del hormigón blanco para revestir el exterior del edificio es un homenaje a los tonos pálidos de las playas de Carrasco, fusionando así la arquitectura con el paisaje circundante.
Uno de los aspectos más destacados de “The Edge” es su patio circular cerrado en vidrio, que sirve como núcleo central del diseño. Este cuenta con un árbol en su interior, que no solo introduce luz natural y vegetación al interior, sino que también crea una experiencia única para sus residentes.
En los niveles superiores, el patio se convierte en un pasaje delgado que atraviesa los apartamentos centrales, conectando los diferentes espacios y proporcionando una sensación de apertura y fluidez.
En términos de sostenibilidad, “The Edge” no se queda atrás. Con jardines en la azotea privados en todas las estructuras y una cuidadosa consideración de la ventilación cruzada y las perspectivas duales, el proyecto se compromete a reducir su impacto ambiental mientras ofrece un entorno habitable de primera clase.
Además, la incorporación de vidrio texturizado en las paredes garantiza la privacidad de los residentes sin comprometer la entrada de luz natural.