La juventud, el talento, la creatividad y la frescura confluyen en MRGO, un estudio de arquitectura que crece a grandes escalas en Madrid.
Tras la iniciativa de Álvaro Mesonero-Romanos y Álvaro G. Onieva, llegó la unión con Amparo Gil y María Marco Balgoma. Con la dirección de proyectos y decoración cubierta, el emprendimiento apunta alto en España y el mundo.
Ambos Álvaros comenzaron su formación en la Universidad Europea de Madrid. Luego coincidieron nuevamente en Sao Paulo, tras formar parte de un convenio unilateral con la Universidad Anhembi Morumbi.
Álvaro G. Onieva terminó la carrera y comenzó a trabajar para el estudio Nieto Sobejano. Por su parte, Álvaro Mesonero-Romanos se fue un año más a Coventry University, antes de empezar a trabajar en el estudio de Miguel Olazabal donde, más tarde, se reencontraron durante tres años.
LOS INICIOS DE MRGO
El estudio comenzó de manera muy orgánica. Los amigos desde la infancia comenzaron a hacer proyectar por su cuenta a principios de 2018, tras estudiar y trabajar. Solo a finales de ese año decidieron juntarse para el proyecto de Alborto en la Calle Princesa.
Tras el éxito, siguieron colaborando juntos en todos sus proyectos durante 2019, hasta que decidieron unificar estudios formalmente en Enero de 2020.
EN PRIMERA PERSONA
“La idea es involucrar a todas las disciplinas desde el principio de la idea. La ventaja está en integrar siempre arquitectura a un espacio que podría conseguirse solamente con interiorismo y decoración. Es decir, no nos limitamos a jugar con el espacio que nos dan, sino que tratamos de modificar esa caja arquitectónica desde el principio del proyecto” explican los arquitectos de MRGO.
“No diríamos que hay fronteras entre disciplinas, aunque sí un cierto orden para que todo funcione, manteniendo así el control de nuestros proyectos e involucrándose en todas las áreas del mismo”.
LO QUE VIENE
De cara al futuro, el estudio tendrá un enfoque en crear proyectos residenciales. Su proyección en los próximos años es crear espacios únicos tanto en España como en el resto del mundo.