Fotografía| ferrari
La relojería de alta gama y el automovilismo se fusionan en el RM 43-01 Tourbillon Split-Seconds Chronograph, una creación conjunta de Richard Mille y Ferrari que combina innovación técnica y espíritu competitivo.
Con un precio estimado de 1.5 millones de dólares, este modelo es una edición exclusiva y muy codiciada por coleccionistas.
UNA PIEZA QUE COMBINA PRECISIÓN Y PASIÓN POR LA VELOCIDAD
La idea detrás del RM 43-01 no es simplemente fabricar un reloj, sino crear una máquina de precisión que refleje la filosofía de las escuderías de Fórmula 1.
La pieza cuenta con un cronógrafo de fracción de segundos —una complicación extremadamente difícil de desarrollar—, que permite medir intervalos múltiples al mismo tiempo, ideal para contextos de alta competencia.
Este nivel de sofisticación se apoya en un tourbillon descentrado, una característica que contribuye a la precisión del mecanismo, incluso frente a los efectos de la gravedad.
Además, cuenta con una reserva de marcha de 70 horas, ideal para quienes valoran tanto el rendimiento como la autonomía.
DISEÑO E INGENIERÍA INSPIRADOS EN LOS ÍCONOS DE FERRARI
Visualmente, el reloj es una obra de arte. La arquitectura abierta del RM 43-01 permite ver gran parte de su mecanismo interno, destacando una placa base de titanio en la que se recorta el icónico Cavallino Rampante.
Esta estética no es casual: está inspirada directamente en modelos como el Ferrari 488 Challenge Evo y el SF90 Stradale. Cada curva, cada detalle, hace eco del diseño automovilístico de la marca italiana.
El resultado es una pieza que se siente como una extensión del mundo Ferrari, con la atención al detalle, la innovación y la elegancia como valores compartidos entre ambas casas.
DOS VERSIONES LIMITADAS QUE RINDEN HOMENAJE A SUS PILOTOS
El RM 43-01 se lanza en dos versiones que celebran el espíritu de la escudería Ferrari de 2025.
Por un lado, la versión en titanio microgranallado se asocia con Lewis Hamilton, recientemente incorporado al equipo. Su estilo elegante, preciso y cerebral se traduce en esta edición sobria pero tecnológicamente avanzada.
Por el otro, la variante fabricada en Carbon TPT® rinde homenaje a Charles Leclerc, con una estética más dinámica y audaz, pensada para reflejar la juventud y el ímpetu del piloto monegasco.
Cada una de estas ediciones está limitada a solo 75 piezas a nivel mundial, lo que las convierte en objetos extremadamente exclusivos.
Para quienes siguen el mundo de la alta relojería y del automovilismo, este modelo es un auténtico trofeo.
OBSESIÓN POR LOS DETALLES
En el RM 43-01, cada tornillo, cada superficie pulida, cada capa de material responde a una lógica de ingeniería pensada hasta el mínimo detalle.
La caja del reloj está formada por más de 400 componentes individuales, ensamblados con precisión quirúrgica.
El pulsador de fracción de segundos, por ejemplo, está diseñado para ofrecer una sensación táctil perfecta al momento de activarse, algo clave para una medición exacta en condiciones de alta exigencia.
Este nivel de detalle también se ve en la elección de materiales: el titanio y el Carbon TPT® no solo aportan una estética diferencial, sino que también ofrecen ligereza, resistencia y comodidad en la muñeca.
UNA COLABORACIÓN QUE VA MÁS ALLÁ DEL MARKETING
A diferencia de otras asociaciones entre marcas de lujo y el mundo deportivo, la relación entre Richard Mille y Ferrari no es superficial.
Desde su inicio, esta colaboración ha estado basada en una visión compartida de excelencia técnica, innovación constante y respeto por la tradición sin renunciar al futuro.
El RM 43-01 es el mejor ejemplo de cómo dos industrias aparentemente distintas pueden dialogar en armonía cuando el objetivo es la perfección.
Richard Mille, conocido por romper los límites de la relojería convencional, encuentra en Ferrari un socio ideal para seguir explorando el concepto de “máquinas para la muñeca”, como él mismo define a sus relojes.
Y Ferrari, por su parte, refuerza su identidad más allá de las pistas, ingresando con fuerza al universo del lujo extremo.