Por| Luciano Kruk Arquitectos | Fotografía| Daniela Mac Adden
En un entorno de dunas agrestes típico de la costa bonaerense, con gran valor paisajístico, Luciano Kruk Arquitectos recibió el encargo para proyectar esta vivienda unifamiliar.
El programa de necesidades habituales era el de una casa de vacaciones y el limitante un presupuesto acotado. El resultado, una propuesta que busca preservar al máximo las magníficas cualidades del lugar.
Luciano Kruk Arquitectos proyectó una vivienda con un programa de necesidades habituales para una casa de vacaciones y el limitante de un presupuesto acotado.
El resultado, una propuesta que busca preservar al máximo las magníficas cualidades del lugar. Un entorno de dunas agrestes típico de la costa bonaerense, con gran valor paisajístico.
El terreno donde se emplaza la vivienda, con 20m de frente por 50m de fondo, tiene la particularidad de presentar en el sentido transversal una fuerte pendiente .
La misma se mantiene en todo el largo del lote, enseñando un lateral al mismo nivel de la calle de acceso y el opuesto elevado unos 4m sobre la duna.
Esto, sumado a que en la parte alta también se concentraba la mayor cantidad de vegetación, fue determinante para la ubicación de la construcción.
JUEGO DE VOLÚMENES
El estudio a cargo del arquitecto Luciano Kruk procuró no modificar en lo más mínimo la topografía original decidiendo dividir el programa en dos volúmenes sencillos.
Así, se cruzó uno sobre el otro en ángulo recto de tal forma que el inferior, de proporción más alargada, se apoye en la parte baja del terreno en sentido longitudinal.
El volumen superior, en tanto, en dirección transversal, quedó apoyado en la parte alta del terreno. Su extremo opuesto sobresale en voladizo para generar bajo su protección el acceso.
El volumen inferior, en contacto con el suelo, aloja las funciones de uso compartido de la vivienda y una habitación para huéspedes en un extremo.
El superior, en tanto, cuenta con los dos dormitorios para la familia. La pendiente transversal, se aprovecha asimismo para generar privacidad volcando hacia el lado donde sube la duna todas las expansiones al exterior.
Por el contrario, el lado opuesto se protege por medio de un filtro realizado con una serie de tablones de quebracho rústico.
Estos han sido colocados verticalmente con una separación cuidadosamente estudiada para que además de privacidad permitan generar una sombra protectora de la incidencia del sol por las tardes.
La construcción descansa en las cualidades nobles del hormigón, en expresión en contraste con la madera de quebracho, el aluminio oscuro y el vidrio.
FICHA TÉCNICA
Arquitectos: Luciano Kruk Arquitectos.
Ubicación: Costa Esmeralda, Buenos Aires, Argentina.
Colaboradores: Belén Ferrand, Ekaterina Künzel, Federico Eichenberg y Pablo Magdalena.
Superficie: 150.0 m2.
Año del proyecto: 2014.
Fotografías: Daniela Mac Adden.