Por | Estudio Gómez de la Torre | Guerrero Arquitectos | Fotografía | Juan Solano
Ubicada en el nacimiento de Los Andes, en la zona más elevada de Lima, la Casa O se asienta en una colina con vista de 180 grados sobre un campo de golf, siguiendo morfológicamente la curva del terreno.
El planteamiento permite que todos los espacios sociales e íntimos puedan disfrutar de la maravillosa vista que proporciona su emplazamiento. Los espacios curvos siempre han estado inmersos en las propuestas del Estudio, los hemos explorado y formado un lenguaje con ellos.
En este caso, la vivienda está trabajada, como indicamos, con líneas curvas que definen un gran circulo que involucra toda la fachada incluyendo un gran pórtico de ingreso, donde la curva se hace más cerrada envolviendo el espacio vidriado del lobby y de la escalera principal, en espiral, con pasos de acero y vidrio, la cual comunica toda la casa. También se ha planteado un ascensor al cual se accede desde la prolongación del lobby.
La parte social se ha estabilizado tomando la cota más alta del terreno pues la pista de acceso es una curva que sube. En ese nivel se encuentra el lobby de ingreso de doble altura, un muro de vidrio lo separa de la sala principal y un puente de vidrio, en el segundo piso, cruza de la zona del dormitorio principal a los dormitorios de los hijos.
Al ingresar a la sala, el paisaje se descubre ante los ojos del visitante. La sala es también, al igual que el lobby, de doble altura y se integra al exterior a través de sus vanos curvos espaciados por dobles columnas redondas que van siguiendo un ritmo constante. Al costado derecho se puede ingresar al comedor y al lado izquierdo a la terraza que colinda con la piscina. Ésta también sigue la curva del terreno y tiene un piso de vidrio por el cual se ilumina y entran los rayos del sol a la segunda piscina debajo, que mantiene la misma forma y, aprovechando la altura que nos permite el terreno, logra salir de la edificación teniendo un espacio libre de cobertura.
Saliendo de la sala llegamos al jardín el cual está ubicado sobre el primer sótano que alberga el estar familiar, el gimnasio, la zona de juegos, un kitchenette, un gran dormitorio adicional y como se indicó antes, la segunda piscina.
Desde el jardín podemos apreciar toda la fachada posterior y las dos terrazas. Una de descanso y la otra como una prolongación de la cocina. Allí se encuentra la parrilla y el horno de barro cubierta por una estructura apersianada de aluminio. Dos dormitorios se levantan con una ligera pendiente y vuelan sobre el jardín marcando interrupciones en la fachada curva que compone todo el volumen; atrás, una parte del volumen sobresale marcado en textura granillada color negro.
El segundo sótano está embutido en la colina y las paredes, que por la diferencia de nivel de la pista, se muestran al entorno. Se han enchapado en piedra Talamoye, la cual se mimetiza con la roca de la pequeña colina.
La zona de servicio se encuentra en el punto opuesto a la vista que tiene la casa. De esta manera, se desarrolla en los dos niveles más bajos, tiene un patio interior por donde ilumina y ventila. A este gran ambiente de usos múltiples también se accede por una escalera exterior. Parte del ingreso principal que da a la calle y llega a una pequeña plazueleta.
FICHA TÉCNICA
Arquitectos: Estudio Gómez de la Torre & Guerrero Arquitectos.
Ubicación: Lima, Perú.
Área proyecto: 1456 m2.
Año proyecto: 2015.
Fotógrafía: Juan Solano.