Por | beef architekti | Fotografía | Tomeu Canyellas
Mallorca es una isla llena de bellos paisajes naturales junto a pintorescos pueblos de piedra llenos de historia y tradición. Se llegó como visitantes inconscientes, que se aprendió paso a paso a adentrarse en el territorio mediterráneo y a su arquitectura vernácula.
El diseño se refleja utilizando técnicas y materiales tradicionales como piedras de una cantera local. Este material se usa para la fachada, que se basa en un diseño típico que se puede encontrar en toda la isla, tanto en una cerca como en muros de contención.
Casa Fly está construida mediante el uso de una técnica tradicional en seco llamada ‘Pedra en sec’. Este diseño local ha sido declarado como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO en 2018.
Además de la estética, la enorme fachada ayuda a mantener la vivienda fresca durante los meses de verano y tiene un gran potencial para acumular calor en invierno.
La propiedad respeta las condiciones locales, por lo que ofrece una serie de sistemas naturales de sombreado o ventilación. En primer lugar, las ventanas se introducen en el interior de la estructura para crear sombra a partir de las losas de hormigón.
Las persianas de madera plegables son otra forma natural de prevenir el calor. Reflejan las fachadas de las casas tradicionales de Mallorca. Las estrechas láminas verticales crean un tierno juego de sombras en el interior, que complementa el ambiente tradicional local. Los espacios entre las láminas permiten la circulación del aire, incluso cuando las persianas están cerradas.
El diseño propone la ventilación natural, que puede utilizarse localmente o en toda la propiedad según las necesidades actuales. Varias aberturas de ventanas en cada piso permiten que el aire fresco entre y fluya a través de la vivienda hasta las claraboyas, lo que proporciona ventilación vertical y horizontal.
Casa Fly está en armonía con la arquitectura local al utilizar materiales, técnicas y principios empíricos tradicionales. La fachada de piedra fluye continuamente hacia el interior en combinación con el yeso de cal.
La intención era mantener un interior con un fondo neutro, lo que permite que destaque el mobiliario hecho a medida. La madera, la piedra local y el hormigón son los materiales más utilizados. Cada material tiene un papel específico en el diseño.
Las láminas de madera adyacentes a la escalera crean un eje vertical de doble altura. Un grupo de lámparas colgantes de cerámica hechas a mano sobre la mesa de comedor, da una impresión rústica y única a toda esa zona. Y al final, una estatua abstracta de un ángel de bronce se impone en el vestíbulo.
El entorno, junto con la posición de la vivienda, crea diferentes vistas en cada nivel. En el piso inferior, se conecta visualmente con el mar interminable. Por otro lado, desde las habitaciones, situadas en el piso superior, se ve la hermosa ciudad iluminada durante las horas nocturnas.
La ciudad se puede ver a través del hueco entre el terreno inclinado y las copas de los pinos. La tercera vista final es desde la piscina infinita, donde el agua se mezcla continuamente con el mar y el horizonte. En definitiva, Casa Fly permite a sus habitantes vivir momentos extraordinarios.
FICHA TÉCNICA
Arquitectos: beef architekti.
Ubicación: Mallorca, España.
Área proyecto: 403 metros cuadrados.
Año del proyecto: 2020.
Fotografía: Tomeu Canyellas.
