Por | Araja Studio | Fotografía | Fernando Guerra | FG+SG
Casa Calma está inserta en un pinar junto a la playa y tenía como objetivo principal servir como un refugio de una vida más caótica en el centro de la ciudad.
Conceptualmente, para alcanzar este fin se recurrió a cuatro “láminas”: dos horizontales que constituyen el pavimento y la cubierta, y dos verticales que constituyen los muros.
Estos cuatro elementos comparten la misma materialidad, pero se utilizan perfiles reentrantes entre ellos para acentuar su individualidad. Y al mismo tiempo, marcar la dependencia estructural entre ellos.
Además del tono de arena que recubre Casa Calma, predominan el estuco blanco, el vidrio, el aluminio y la madera.
El programa de la habitación, adecuación al pequeño declive del terreno, apertura de vanos y exposición al clima fue desarrollado siempre privilegiando la integridad del concepto inicial, que al ser algo rígido, configura una pantalla blanca para la exposición de piezas y objetos personales a nivel interior. Mientras que a nivel exterior se produce una apropiación de la construcción por parte del jardín, atenuando la inflexibilidad del diseño.
FICHA TÉCNICA
Arquitectura: Araja Studio.
Ubicación: Almada, Portugal.
Año: 2024.
Área: 200 metros cuadrados.
Fotografía: Fernando Guerra | FG+SG.