Por | TAO – Trace Architecture Office
La isla de Jiming se alza solitaria en medio del mar y es conocida por sus acantilados, rocas y horizonte marino, que crean una sensación de lejanía de la ciudad. Café en el acantilado y Casa Torre está al borde de un acantilado, frente al inmenso mar del norte, como si fuera el fin de la tierra.
Con montañas escarpadas y un mar frío, el edificio de hormigón se asienta en el paisaje natural como una roca gigante.
Un extremo del edificio está incrustado en la montaña rocosa, donde el tejado prolonga la forma de la tierra, apuntando hacia el horizonte marítimo.
En contraste, el otro extremo sobresale del borde del acantilado como si estuviera a punto de desprenderse de la montaña y extenderse hacia el mar, creando una tensión entre artificialidad y naturaleza.
Bajando las escaleras hacia el interior del edificio, como adentrándose en el interior de la montaña. Después de experimentar las pesadas paredes de concreto, uno volverá a encontrarse con el mar en el borde del voladizo, sintiendo que flota sobre él. La abertura en el suelo de la parte sobresaliente del edificio da a la gente una idea de la altura del acantilado.
En la parte trasera del edificio hay un espacio diseñado para ofrecer unas vistas espectaculares del mar, al que sólo se puede acceder atravesando un túnel oscuro.
Detrás de la puerta hay un espacio de meditación con una claraboya, que ofrece un remanso de tranquilidad en la montaña.
La cafetería es un plano horizontal que apunta hacia el horizonte. Mientras que Café en el acantilado y Casa Torre es un volumen vertical que apunta hacia el cielo.
Con una planta de sólo 4,5 m x 4,5 m, Café en el acantilado y Casa Torre aparece como un pequeño punto frente a la inmensidad del mar, ganando energía.
En el interior de Café en el acantilado y Casa Torre, los espacios habitables, como el salón, el estudio, el dormitorio y el cuarto de baño, que normalmente se disponen horizontalmente, se organizan verticalmente de abajo arriba.
Cada nivel tiene una ventana con una altura, un ángulo y una proporción diferentes para disfrutar de las vistas, lo que lleva a las personas a varias perspectivas y dimensiones del mar.
Con horizontalidad y verticalidad, ascenso y descenso, inserción y voladizo, el edificio se conecta con la tierra y el cielo a través de los gestos básicos de la arquitectura, llevando a las personas de vuelta a la naturaleza.
FICHA TÉCNICA
Proyecto: TAO – Trace Architecture Office.
Lugar: Weihai, China.
Año: 2022.
Área: 581 m².
Fotografia: Kejia Mei, Xiangzhou Sun.
