Fotos | @statueellisnps
La Estatua de la Libertad es un símbolo de los Estados Unidos. Se encuentra en el puerto de Nueva York como emblema de libertad y democracia y atrae a miles de turistas.
Es tal vez, uno de los monumentos que más hemos visto en películas, fotos y cualquier imagen relacionada a EEUU o la cosmopolita Manhattan.
Regalo de Francia, la Estatua de la Libertad conmemora la alianza con los Estados Unidos durante la Revolución Americana. La idea del monumento fue propuesta en 1865 por Edouard de Laboulaye, un destacado pensador político y abolicionista francés. Al llamar la atención sobre los logros de Estados Unidos, Laboulaye esperaba que los franceses se sintieran inspirados para buscar su propia democracia.
La estatua de la Libertad Iluminando al Mundo fue diseñada por el escultor francés Frédéric Auguste Bartholdi. Fue construida por Gustave Eiffel en cobre. Su figura es la de una mujer vestida con túnicas sueltas y una corona representa a Libertas, la diosa romana de la libertad.
Con una altura de 46 metros, en una mano sostiene una antorcha sobre su cabeza. En la otra una tablilla con la inscripción “JULIO IV MDCCLXXVI”, la fecha de la Declaración de Independencia de los Estados Unidos.
Se puede llegar hasta ella, ubicada en la Liberty Island. Este sitio era visible para los barcos que ingresaban al puerto de Nueva York. Se consideraba, además, una puerta de entrada a América. El 28 de octubre de 1886, la estatua se inauguró ante un millón de personas.
Si bien el paseo por la isla es gratis, se debe tomar un ferry desde Battery Park. Una vez allí, a quienes se animan, es recomendable subir al pedestal para rodear el monumento. Luego aventurarse hasta la corona de la estatua tiene como premio una inmejorable vista panorámica de la zona.