Por | UNStudio
Echo es un edificio interfacultativo generador de energía que ofrece una amplia variedad de aulas para atender a la diversidad de métodos de enseñanza y estilos de estudio de la universidad.
Al ser el edificio más sostenible de la TU Delft (Universidad Tecnológica de Delft), Echo contribuye a las ambiciones de la universidad de operar un campus totalmente sostenible para 2030.
Para Echo, UNStudio, en colaboración con Arup y BBN, creó un diseño que admite plenamente diferentes tipologías educativas y métodos de enseñanza con un edificio generador de energía en el que la adaptabilidad y el bienestar del usuario son fundamentales.
Un edificio de campus saludable, para las personas y el planeta. 1.200 paneles solares, instalaciones inteligentes, un buen aislamiento y un sistema de almacenamiento de calor y frío garantizan que Echo podrá proporcionar más energía de la que necesita para su funcionamiento diario.
Esto incluye la energía relacionada con los usuarios, como el consumo de electricidad para los ordenadores portátiles, la iluminación y los servicios de comida. El 90% del mobiliario utilizado en el edificio también se ha reutilizado.
La transparencia fue esencial para el diseño de Echo. No sólo garantiza la máxima luz natural en el interior del edificio (que se sabe que tiene beneficios para la salud de los usuarios, sino que también reduce la necesidad de iluminación artificial), sino que también crea una conexión visual con el campus más amplio y con la naturaleza circundante. De este modo, se evita una experiencia “institucional” cerrada para los usuarios.
Mientras que el carácter abierto y público del edificio conecta los dos lados del campus y proporciona un entorno luminoso, estimulante y acogedor tanto para los profesores como para los estudiantes.
Sin embargo, para evitar la ganancia de calor, también es esencial impedir el exceso de penetración de la luz solar. El sobrecalentamiento del edificio se evita mediante una combinación de protección solar y el bajo factor de penetración solar del vidrio. Además, los profundos toldos horizontales de aluminio aportan a esta causa. Estas marquesinas están interconectadas por cables a lo largo de los cuales las plantas trepadoras forman una sutil fachada verde que filtra la luz del día.
Para garantizar un aire limpio en el edificio, se instala un plénum de suelo por encima de las losas alveolares. En este caso, el aire fresco se bombea desde el suelo, en lugar de hacerlo desde arriba, evitando así la circulación por la sala. Las rejillas de ventilación de este sistema, junto con la instalación de computación del suelo, pueden reubicarse fácilmente en caso de que la distribución de las salas cambie en el futuro.
No sólo se ha prestado mucha atención al impacto medioambiental de los materiales utilizados en la construcción, sino que el edificio se ha diseñado en la medida de lo posible según los principios de circularidad.
Utilizando grandes construcciones de pórtico con retículas de gran tamaño, los pilares discurren a lo largo del borde del edificio, creando espacios sin columnas con grandes luces.
Las cerchas de acero tienen tamaños estándar y son desmontables para poder reutilizarlas en otro lugar después de la vida útil del edificio. Al igual que las losas alveolares, también reutilizables.
Un edificio que estimula el movimiento y la colaboración. Echo es un edificio educativo con espacios multifuncionales que trasciende los actuales entornos de aprendizaje.
El diseño del Edificio interfacultativo generador de energía apoya la cultura contemporánea de “todo en cualquier lugar”, en la que los espacios intermedios tienen también gran importancia y se estimula el movimiento físico.
Echo también proporciona espacio para el tiempo libre. Una variedad de plataformas para la reflexión, inspiración y comunicación.
El interior ofrece una cálida bienvenida a los visitantes. En determinados puntos, las nervaduras de bambú se extienden a lo largo del techo, formando parte integral del diseño.
El aspecto artesanal del bambú se extiende alrededor de la escalera central, que en un solo gesto une los espacios de estudio y cooperación en un mundo conectado de aprendizaje, colaboración y conexión.
Esta “gran escalera” central facilita y promueve el movimiento físico a través del edificio. Contribuyendo así a la salud de estudiantes, investigadores y profesores por igual.
Un campus preparado para el futuro es un campus activo. Por ello, Echo no sólo conecta con el espacio público circundante, sino que lo define.
La plaza adyacente continúa a través de la planta baja transparente del edificio y conecta con la calle del otro lado. Convirtiendo la planta baja de Echo en una plaza pública cubierta y un conector público que hace del mundo invisible del aprendizaje una experiencia visible y atractiva.
Dos volúmenes escultóricos (la gran sala de conferencias para 700 personas y el espacio de debate), dirigen el flujo de personas a través de esta plaza cubierta. La orientación diagonal de estos volúmenes define simultáneamente dos grandes rincones transparentes. Uno de los cuales alberga un restaurante con terraza frente al D: Dreamhall, y el otro un gran paisaje de estudio.
A prueba del futuro: una gran variedad de salas de enseñanza flexibles. El edificio Echo, de 8.844 m2, ofrece espacio para conferencias y tutorías, trabajo en grupo, enseñanza basada en proyectos, debates y autoaprendizaje para unos 1.700 estudiantes a través de las salas de conferencias, las aulas y una variedad de espacios de estudio.
Echo alberga un total de siete salas de enseñanza, la mayoría con una disposición flexible.
La sala de conferencias más grande de la planta baja, con capacidad para 700 personas, puede dividirse en tres salas distintas en 15 minutos. Esto permite que se celebren varias conferencias o eventos simultáneamente y permite la máxima programación del espacio.
Un sistema similar de paredes móviles se utiliza en el espacio didáctico mixto del primer nivel para que éste pueda dividirse en dos aulas de 144 espacios cada una cuando sea necesario.
Los más de 300 espacios de estudio repartidos por todo el edificio pueden utilizarse para el trabajo en grupo y el autoestudio.
Las distintas salas de enseñanza se han diseñado en función de las necesidades actuales y futuras de los profesores y estudiantes. En Echo, la atención se centra en las salas de enseñanza de tamaño medio y grande, con capacidad para entre 150 y 700 personas.
Además de estas salas más grandes, también hay una sala de estudio de casos que es especialmente adecuada para la enseñanza motivacional/interacción entre profesores y estudiantes. Asimismo, hay salas de cuatro niveles para la enseñanza basada en proyectos, cada una con capacidad para casi 70 personas.
En los espacios de oficina de la segunda planta se ha utilizado un sistema de paredes modulares que permite modificar la distribución si fuese necesario.
En caso de que haya demanda de cambio funcional en el futuro, estos espacios de oficina pueden convertirse en espacios didácticos con una interrupción mínima.
FICHA TÉCNICA
Arquitectos: UNStudio.
Ubicación: Delft, Países Bajos.
Área del proyecto: 8844 metros cuadrados.
Año del proyecto: 2022.
Fotografía: Eva Bloem, Hufton+Crow.
