A veces la industria del cine exige sacrificios extremos, y las transformaciones físicas impactantes son prueba del compromiso de los actores al encarnar personajes inolvidables que marcaron sus carreras.
CHRISTIAN BALE EN “EL MAQUINISTA”
Uno de los casos más icónicos de transformaciones físicas impactantes es el de Christian Bale en El maquinista (2004).
El actor llevó su compromiso al límite, perdiendo más de 27 kilos y reduciendo su peso a 54 kilos gracias a una estricta dieta de café, una manzana y una lata de atún al día.
MATTHEW MCCONAUGHEY EN “DALLAS BUYERS CLUB”
Matthew McConaughey perdió más de 20 kilos para interpretar a Ron Woodroof, un hombre con VIH en los años 80, en Dallas Buyers Club (2013).
Su desgarradora actuación impactó al público y le valió el Oscar a Mejor Actor, demostrando un compromiso absoluto y un realismo impresionante en su personaje.
CHARLIZE THERON EN “MONSTER”
Charlize Theron desafió los estándares de Hollywood en Monster (2003), donde se transformó por completo para interpretar a la asesina Aileen Wuornos.
Su aumento de peso y maquillaje la hicieron irreconocible, y su actuación le valió el Oscar a Mejor Actriz.
JARED LETO EN “CHAPTER 27” Y “DALLAS BUYERS CLUB”
Jared Leto es famoso por sus drásticas transformaciones. En Chapter 27 (2007), ganó más de 30 kilos para interpretar a Mark David Chapman, el asesino de John Lennon, afectando su salud.
Años después, en Dallas Buyers Club, adelgazó drásticamente para encarnar a un transexual con VIH, papel que le valió el Oscar a Mejor Actor de Reparto.
ROBERT DE NIRO EN “TORO SALVAJE”
Robert De Niro llevó su compromiso al límite bajo la dirección de Martin Scorsese.
Transformó su físico dos veces: primero, se puso en forma como el boxeador Jake LaMotta en su apogeo, y luego ganó 30 kilos para retratar su decadencia. Su esfuerzo le valió el Oscar a Mejor Actor.
RENÉE ZELLWEGER EN “EL DIARIO DE BRIDGET JONES”
Renée Zellweger aumentó de peso de manera saludable para encarnar a la encantadora Bridget Jones en la comedia romántica El diario de Bridget Jones (2001).
Su transformación, aunque no tan extrema como otras, rompió esquemas en Hollywood y ayudó a que las mujeres se sintieran más identificadas con personajes reales y cercanos.
JOAQUIN PHOENIX EN “JOKER”
Joaquin Phoenix se transformó por completo para interpretar a Arthur Fleck en Joker (2019). Perdió más de 20 kilos, un cambio que impactó tanto su apariencia como su actuación.
Su interpretación, profundamente auténtica, le valió el Oscar a Mejor Actor y el reconocimiento unánime de la crítica.
HILARY SWANK EN “MILLION DOLLAR BABY”
Hilary Swank ganó más de 10 kilos de músculo para su papel de boxeadora en Million Dollar Baby (2004), tras un intenso entrenamiento y dieta.
Su compromiso le valió el Oscar a Mejor Actriz, demostrando que las transformaciones físicas también destacan entre las actrices de Hollywood.
