Fotografía| matiasale13
La vida de Matías Alé ha dado muchos giros en los últimos años, y una de sus más recientes facetas es la de disfrutar del hogar que comparte con su pareja, Martina Vignolo.
La casa que han construido juntos no solo refleja el estilo personal de la pareja, sino que está cargada de detalles que hablan de su historia y su amor por los viajes.
LA CASA DE MATÍAS ALÉ Y MARTINA VIGNOLO: UN HOGAR LLENO DE VIDA Y RECUERDOS
Las paredes de la casa están repletas de recuerdos familiares y personales, especialmente en la sala de estar, donde un gran mapa del mundo se convierte en el centro de atención, rodeado de fotografías y objetos decorativos que evocan momentos especiales y vivencias compartidas
Este detalle no es casualidad, ya que la pareja comparte una pasión por viajar y descubrir nuevos destinos, lo que queda reflejado en la elección de la decoración.
Cada rincón del hogar tiene un toque personal. Las fotos familiares y de sus experiencias juntos no solo decoran las paredes, sino que también están distribuidas estratégicamente en estantes y mesas, creando un ambiente lleno de historias y momentos compartidos.
Para Alé, cada fotografía cuenta una parte importante de su vida, un recordatorio constante de los buenos momentos vividos.
La cocina es uno de los espacios más destacados en la casa de Matías Alé y Martina Vignolo.
Matías disfruta cocinando para sus seres queridos, en un ambiente moderno pero acogedor. Amplios ventanales inundan el espacio con luz natural, creando una sensación de amplitud y conexión con el exterior.
El mobiliario combina funcionalidad y calidez con detalles en madera, mientras que la isla central es el punto de encuentro perfecto para reuniones íntimas.
La casa de Matías Alé y Martina Vignolo es más que un lugar donde vivir; es su refugio, lleno de recuerdos, historias y planes futuros. Decorada con fotografías y detalles personales, este espacio se destaca por su atmósfera cálida y amorosa.