Fotografía | @kyoko1903
Ubicado en el corazón de Tokio, Asakusa es un barrio histórico y un tesoro cultural que te transportará al Japón tradicional.
Este pintoresco distrito es famoso principalmente por su icónico Templo Sensoji, un lugar sagrado con más de mil años de historia. Al recorrer las calles de Asakusa, te vas a sumergir en una experiencia única.
Claro está, una visita obligada es el Templo Sensoji. Este se alza majestuoso con su puerta Kaminarimon, adornada con una inmensa linterna roja.
Al cruzarla, vas a ingresar en Nakamise-dori, una calle comercial repleta de coloridos puestos que ofrecen desde recuerdos tradicionales hasta delicias culinarias locales.
Vas a poder probar el dorayaki, un pastel relleno de anko (pasta de judía dulce), o disfrutar de un paseo con un helado melonpan en la mano.
Las vistas panorámicas de la Skytree, una de las torres más altas del mundo, son espectaculares desde la calle Shin Nakamise.
Asakusa también es conocida por su vibrante escena cultural. Si tenés la suerte de visitarla durante el festival Sanja Matsuri, te vas a encontrar con un desfile lleno de coloridos trajes tradicionales.
Este evento anual, que suele tener lugar en mayo, es una gran oportunidad para sumergirse de lleno en la celebración japonesa.
Si sos fan de Hello Kitty y otros personajes de Sanrio, Sanrio Gift Gate Asakusa te va a resultar un paraíso de compras. Este encantador comercio ofrece una amplia selección de productos en un ambiente único.
Para tomar un merecido descanso, vas a tener que dirirte Hat Coffee, a solo 5 minutos a pie de la estación de Kuramae. Allí, vas a poder disfrutar de un delicioso café con latte art personalizado, una verdadera obra maestra en tu taza.